En esta guía turística del Valle de Baztán os traemos todo lo necesario para viajar a este estupendo rincón del norte de Navarra. Se trata de un lugar único, precioso y en el que confluyen muchas cosas que nos gustan: gastronomía, literatura, senderismo, espeleología… Acompañadnos en este viaje a sus pueblos y espacios naturales, en una de las mejores escapadas de fin de semana que se pueden hacer por tierras navarras.
Tabla de contenidos
Introducción: un paisaje idílico y repleto de posibilidades
El Valle de Baztán se encuentra a tan solo 50 kilómetros al norte de Pamplona, justo en la frontera con Francia. El nombre viene dado por el río Baztán, que no es otra cosa que la denominación que recibe el Bidasoa a su paso por estas tierras.
¿Qué podéis esperar del Valle de Baztán? Pues un sitio muy arraigado a la tradición, pero que también entiende el turismo de una manera moderna. Hay pueblos preciosos, muchas rutas para hacer senderismo y cada rinconcito tiene su pequeña historia.
Hablamos de un sitio súper animado, en el que prácticamente hay un restaurante en cada pueblo (incluso en los más remotos) y en el que siempre hay cosas que hacer. La mejor época para ir es el otoño, ya que es cuando el paisaje se muestra más espectacular, pero realmente es una visita recomendable en cualquier momento del año.
Cómo llegar y cómo moverse por el Valle de Baztán
Tal y como hemos dicho, el Valle de Baztán está al norte de Navarra. Llegar es es muy sencillo desde Pamplona (tres cuartos de hora) y desde San Sebastián (una horita), por lo que son excursiones perfectas desde esa zona. Además, desde Madrid no se tarda ni cinco horas (se puede ir por la A1 o por la A2), por lo que es un trayecto más que asequible.
Una vez en el valle, son varias las carreteras de referencia. La primera es la N-121-B, rápida y que atraviesa el Baztán de sur a norte. Eso sí, esta no os comunicará con buena parte de los pueblos. Para ello, tendréis que ir a otras como la NA-2540 (donde está el famoso mirador del que os hablaremos un poquito más abajo) o la NA-2600 (imprescindible para ir a sitios como Arizcun o Bozate.
Ojito, que pese a que el valle puede parecer chiquitito, las distancias se hacen largas. Tened en cuenta que se transita por carreteras con muchas curvas, por lo que si no planificáis bien la ruta os pasaréis más rato del deseable en la carretera.
Turismo en el Valle del Baztán
Pueblos del valle
Por motivos administrativos, los quince pueblos que hay en el Valle de Baztán están agrupados en un único término municipal. Su superficie, de casi 400 kilómetros cuadrados, le convierte en el más grande de toda Navarra.
Los lugares están distribuidos, a su vez, en cuatro cuarteles. Aunque ya se ha perdido, esta es la división que ha existido allí desde que el mundo es mundo. Nosotros pudimos visitar dos urbes en cada uno de ellos:
Así, en el cuartel de Baztangoiza visitamos Erratzu, una pequeña localidad repleta de palacios que nos dio la bienvenida al Valle de Baztán con los brazos abiertos.
Allí mismo también visitamos Amaiur, que tiene el honor de haber sido la última en unirse al término municipal (allá por 1969). Imprescindible visitar su castillo y recorrer de arriba a abajo la coqueta calle principal que atraviesa todo el pueblo.
En el cuartel de Elizondo visitamos el pueblo del mismo nombre, que además es la capital del valle. Es el pueblo más poblado y en el que están algunas de sus estampas más reconocibles. Parada absolutamente obligada si se quiere conocer la realidad más urbana del Batán.
Junto a Elizondo está Elbete, otro pueblo con muchísimo encanto. Tiene la ventaja de ser mucho menos turístico y conocido que la capital, por lo que encontraréis un modo de vida mucho más arraigado a la tradición.
En el cuartel de Erberea visitamos Irurita, que es la segunda urbe en tamaño del Valle del Baztán. Es un lugar romántico y tranquilo, perfecto para tomar un chocolate a la taza en su Plaza del Pueblo o para estirar las piernas subiendo hasta su Casa-Torre.
A escasos kilómetros de allí visitamos Gartzain, un lugar mucho más apartado y en el que la pervivencia del euskera es máxima. De hecho, todos los habitantes del pueblo hablan esa lengua.
Por último, en el cuartel de Basaburua visitamos Aniz, un sitio que lucha contra el olvido de la mejor manera posible: poniendo en valor su arquitectura tradicional y su economía agroganadera.
La última parada la hicimos en Berroeta, un lugar que antiguamente era de paso obligado pero que a día de hoy está en una situación marginal. Sin embargo, ofrece unas vistas excelentes del valle y tiene algunos edificios super interesantes.
Pese a no formar parte exactamente del Valle del Baztán, estando en la zona hay dos visitas obligadas y claramente integradas en su propuesta turística. La primera de ellas es Zugarramurdi, asociada a la brujería y la magia desde hace ya varios siglos.
Tampoco os podéis ir de allí si visitar Urdazubi, donde encontraréis un monasterio enorme, molinos y casas de indianos.
Cuevas
Estas dos últimas localidades tienen valor tanto en la superficie como bajo tierra. Y es que tanto en Zugarramurdi como en Urdazubi podréis visitar dos enormes y preciosos conjuntos de cuevas. Las primeras son mucho más famosas a nivel cultural, ya que son el epicentro de todas las leyendas e historias sobre brujería de esta zona de Navarra. Sin embargo, las segundas son absolutamente excepcionales a nivel geológico.
Nosotros visitamos únicamente las cuevas de Zugarramurdi, ya que viajamos con perro y son dog friendly. Por el contrario, no podréis entrar a las cuevas de Urdazubi si vais con perrete.
Espacios naturales
Ir al Valle de Baztán os pondrá también en disposición de visitar algunos espacios naturales únicos en la Península Ibérica. Nosotros fuimos a dos, siendo el primero de ellos la Cascada de Xorroxin. Llegar a este precioso salto de agua os tomará un par de horas entre ir y volver, pero os aseguramos que cada paso merece la pena.
Por otro lado, también nos dejamos caer por el Señorío de Bertiz, un pequeño Parque Natural con unas posibilidades de hacer senderismo casi infinito. Hicimos una ruta estupenda por el interior de sus bosques, disfrutando de una tardía (aunque evocadora) estampa otoñal.
Por cierto, si gozar de una buenísima panorámica del valle sin necesidad de caminar, os recomendamos ir hasta el kilómetro 14 de la NA-2540. Allí os espera el conocido Mirador del Valle de Baztán, desde donde podréis contemplar su estampa más típica
Organización de la ruta
El Valle de Baztán da para mucho, todo lo contrario que las vacaciones de dos humildes asalariados como nosotros. Por eso, hicimos este viaje en forma de escapada de fin de semana. Teniendo en cuenta que lo hicimos desde Madrid y en pleno otoño, el viernes no pudimos llegar a ver nada. Dicho de otro modo: concentramos las visitas en dos jornadas completas.
Así, el primer día lo dedicamos a ir a la Cascada de Xorroxin. Ya que estábamos allí visitamos Erratzu, desde donde fuimos a Amaiur. Allí mismo comimos, para después ir a Zugarramurdi y visitar sus cuevas. De ahí fuimos hasta la cercana Urdazubi, cuyo casco histórico también nos pateamos. Terminamos esta maratoniana jornada con una ruta caminando de una hora y media, recorriendo tanto Elizondo como Elbete.
El segundo día comenzó también con algo de senderismo, aunque en este caso en el Parque Natural del Señorío de Bertiz. Tras una ruta de casi tres horas, nos dedicamos a visitar cuatro pequeños pueblos: Irurita, Gartzain, Aniz y Berroeta. Empezamos de norte a sur para ir haciendo camino ya de vuelta a casa.
Una promoción turística de calidad
No nos parecería justo hacer una guía del Valle de Baztán sin hacer una mención específica a su excepcional e impresionante propuesta turística. Pocas zonas hemos visto en Europa entera con un planteamiento tan acertado, accesible y detallado.
El Valle de Baztán cuenta con una web oficial excelente, en la que es posible encontrar información de todo tipo sobre este destino turístico: qué ver, productos típicos, folklore… Por supuesto, allí también podéis descargar toda clase de folletos turísticos.
Precisamente, pudimos hacernos con un montón de PDFs con mapas y rutas turísticas de todos los pueblos que queríamos visitar. Incluso localidades muy chiquititas, como Aniz o Elbete, tenían su propio folleto.
Por último, en el Valle de Baztán son conscientes de que es un destino muy transitado en algunos momentos del año (como en otoño, por sus rutas por la naturaleza). Por ello, es posible reservar de manera gratuita el aparcamiento en dos de los sitios más concurridos: el acceso a la Cascada de Xorroxin y Amaiur.
La Trilogía del Baztán, un reclamo turístico del siglo XXI
Tampoco se puede hablar de este sitio sin hacer referencia a la Trilogía del Baztán, la famosísima obra de novela negra escrita por Dolores Redondo. Y es que El Guardián Invisible, Legado de los Huesos y Ofrenda en la Tormenta es de lo mejorcito que se ha escrito en España en novela negra en las últimas décadas.
Los tres libros (junto con la precuela La Cara Norte del Corazón y más secuelas que seguro que se acabarán publicando) siguen los pasos de Amaia Salazar, una inspectora de policía que tiene que resolver terribles crímenes ocurridos en el Valle de Baztán.
Aunque ya de por sí los libros son famosos en el mundo entero (alrededor de unas 40 editoriales los han publicado por doquier), sin duda la Trilogía del Baztán es reconocible por el gran público por la adaptación al cine protagonizada por Marta Etura. Disponible en Netflix en todo el planeta, hablamos de tres películas que enganchan y que son perfectas para una maratón. ¡Que no os falten ni las mantas ni las palomitas!
Gastronomía y souvenirs
Como no podía ser de otro modo, en el Valle de Baztán se come muy bien. Más allá de toda la gastronomía vasconavarra típica, hay algunas particularidades que no deberíais perderos. Una de ellas son los talos, una especie de tortitas de harina de maíz rellenas de bacon, txistorra y similares.
Por supuesto, no podéis perderos el queso típico de allí: el Idiazabal. Una auténtica joya que debería ser conocida en el mundo entero. Misma cosa se podría decir de la ternera de Baztán o de la sidra ecológica que se fabrica por estos lares.
En materia de dulces, destacan las mermeladas (mención aparte merece Irular, un pequeño proyecto familiar que vende su producto en la plaza de Irurita).
También se podría hablar del chocolate, con Malkorra (en Elizondo) y Arkupe Txokolateak (en Elizondo e Irurita) como punta de lanza.
Por último, la Trilogía del Baztán ha puesto de moda los txantxigorris, un postre típico de la repostería tradicional navarra que puede encontrarse en prácticamente cualquier pastelería. Podéis incluso acudir a la Panificadora Baztanesa, una fábrica tradicional que sirvió como escenario para la sede de la mítica Mantecadas Salazar.
Aunque todo ello serviría a las mil maravillas como souvenir (nosotros nos volvimos con varios tarros de mermelada y una tableta de chocolate), en todo el valle encontraréis tiendas de artesanía de primer nivel. Algunos ejemplos destacados son Fantxike y Calzados Virgilio, ambos en Elizondo, donde podréis comprar vestimentas tradicionales.
Excursiones por los alrededores
Se da la circunstancia de que el Valle de Baztán tiene a tiro de piedra un montón de sitios interesantes, por lo que puede ser el trampolín perfecto para conectar con otras muchas maravillas del Pirineo.
Mirando hacia el norte, el vecino más inmediato es el valle de Xareta, un lugar en el que conviven dos pueblos navarros (Zugarramurdi y Urdazubi) con dos franceses (Ainhoa y Sare). Incluso hay una ruta que los conecta todos a pie, por lo que es la excursión más obvia desde el Baztán.
Si levantáis un poco la cabeza, veréis que todo el norte está dominado por el País Vasco Francés. Es uno de nuestros lugares favoritos de Europa, en el cual hay absolutamente de todo: playas paradisíacas, grandes ciudades, pueblos con todo el encanto… ¡Imprescindible!
Ya en la Península Ibérica, hacia el oeste tenéis Oarsoaldea, una subcomarca entre San Sebastián y la frontera realmente fascinante. En ella tenéis algunos de los pueblos más bonitos de Gipuzkoa, como Pasajes o Lezo. También por esa zona os espera Hondarribia, un pueblo increíble.
Hacia el sur, en la propia Navarra, tenéis muy cerquita pueblos como Lesaka o Etxalar, los cuales son una auténtica monada.
Por último, hacia el este, a dos horitas, tenéis el Pirineo de Huesca. Quizá esto esté un poquito más lejos, pero es una de las zonas más bonitas de la cordillera.
Mapa turístico del Valle de Baztán
Aquí os dejamos un mapa turístico del Valle de Baztán, en el que hemos localizado todos los sitios que han sido mencionados a lo largo del artículo.
Extra: Nuevo Baztán, el spin off madrileño
Para terminar, una curiosidad. En la Comunidad de Madrid os espera Nuevo Baztán, un pueblo creado de la nada por el baztandarra Juan de Goyeneche. Es uno de los lugares más interesantes del sureste madrileño y tiene grandes vínculos con el Valle de Baztán, por lo que sería súper guay si podéis visitarlo antes o después de dejaros caer por el valle.
