¿Sabíais que existe un Código de Conducta de las islas Lofoten? Es una de las zonas más visitadas y con más personalidad del norte de Noruega, por lo que las autoridades turísticas locales y nacionales han elaborado un decálogo de buenas prácticas para los viajeros. Así, todos podremos disfrutar al máximo del archipiélago más bonito del mundo sin deteriorarlo, molestar a los vecinos ni entorpecer la experiencia de otros viajeros. En este artículo os contamos cuales son las buenas conductas y hablamos de cada una de ellas.
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Hay que acampar solo en los espacios designados
La primera norma es básica. En los países nórdicos existe algo llamado derecho de acceso público a la naturaleza, que básicamente es una declaración de intenciones: mientras que se respete la propiedad privada, todo el mundo tiene derecho tanto a transitar como a pernoctar por la naturaleza. Sin embargo, en las islas Lofoten esto hay que anularlo, ya que hablamos de un ecosistema frágil y con una gran presión turística. Por tanto, el viajero tiene que tener claro que solo hay que acampar en los espacios designados para tal fin. Los vecinos no se andan con tonterías (suelen avisar a la policía en caso de que algún listo se salte esta norma).
No dejéis huellas ni modifiquéis el paisaje
Este segundo precepto es claro: hay que dejar el sitio igual o mejor que como os lo hayáis encontrado. Y esto incluye una mención específica a la gentuza que se dedica a apilar piedrecitas para hacer torres en los caminos, así como para la gente que acampa y luego deja un anillo con la base de su tienda en el suelo.
Moveos solo por caminos ya creados
En la misma línea hay que comportarse si estáis haciendo senderismo o cualquier otra actividad al aire libre: moveos solo por los caminos ya creados y señalizados. De lo contrario, empezarán a surgir senderos por todas partes, deteriorando un ecosistema frágil y del que dependen muchas especies animales y vegetales.
¡No dejéis basura!
Aunque esta norma debería aplicar para el 100% del tiempo que paséis en el planeta, en las islas Lofoten hay que tener especialmente claro que no hay que dejar basura en ningún sitio. Vimos cubos por doquier, así que tampoco es muy complicado, pero si estáis en una zona sin contenedores deberéis llevaros los desperdicios que generéis con vosotros.
Haced pipí y popó solo en aseos
Hablando de desperdicios: nada de hacer pis o caca en medio del campo. Por doquier veréis baños secos o aseos públicos, así que tampoco será complicado seguir esta norma. Si por lo que fuera no podéis reprimir vuestra ansias, recordad que será de gran ayuda para la naturaleza si primero hacéis un hoyo y luego tapáis la plasta que hayáis echado. Por supuesto, nada de dejar un pañuelito usado al lado de vuestro pipí.
Respetad las propiedades privadas
Aunque hay una norma básica (no acampar a menos de 150 metros de una casa habitada), no está de más recordar que hay que respetar la propiedad privada. Ni se os ocurra saltar una valla para hacer una foto o meteros a recoger los frutos de un huerto privado, por poner dos ejemplos básicos.
Hay que conducir con calma
La E10 (conocida también como Lofoten Scenic Route) es una de las carreteras más concurridas de toda Noruega. Es una interminable sucesión de estrecheces, curvas y pequeños atascos, en la cual también hay que convivir con ciclistas y animales, por lo que no debéis nunca de olvidar esto: conducir con calma es sinónimo de evitar problemas.
No hagáis fuego por libre
Aunque en Noruega es habitual hacer fuego (con su consiguiente picnic) en medio de la naturaleza, en las islas Lofoten el tema es un poco más complejo. Hay que hacer fuego solo en los espacios designados para ello, ya que en este ecosistema el riesgo es altísimo. Además, tened en cuenta que en verano está prohibido terminantemente incluso en zonas habilitadas, por lo que deberéis prestar mucha atención a los carteles.
Cuidado con la fauna y la flora
Otra norma obvia: respetad en todo momento el ecosistema tan frágil y maravilloso de las islas Lofoten. Esto tiene un montón de aplicaciones prácticas: nada de perseguir animales en la naturaleza, no os llevéis hojas de las plantas, llevad a vuestro perro siempre atado…
Contribuid a la economía local
Por último, hay un consejo básico: por mucho que viajar por libre y gastando poco dinero siempre dé gustito, la única manera de realizar un turismo de valor es ayudando al desarrollo de la economía local. Comprad productos típicos, realizad tours con empresas locales y, en definitiva, dad apoyo a los proyectos que hacen que la gente del entorno pueda seguir viviendo allí en comunión con la naturaleza. Las islas Lofoten en su conjunto os lo agradecerán.