Las Cascadas del Purgatorio son uno de los espacios naturales más destacados de la Comunidad de Madrid. Hablamos de unos espectaculares saltos de agua ubicados en el extremo occidental del Valle Alto del Lozoya, en la cara norte de la Cuerda Larga. Llegar hasta ellas requiere un poquito de pateo, pero os aseguramos que el esfuerzo merece la pena. Así, aquí os traemos esta ruta de senderismo, en la cual aprovechamos para sacarle todo el partido al Valle del Paular y ver otras muchas cositas interesantes.
Cómo llegar a las Cascadas del Purgatorio: la ruta más completa
Antes de nada, una pequeña advertencia: la ruta tiene dos complicaciones. La primera es que es un poquito larga, ya que en este caso hablamos de algo más de 14 kilómetros. Es más o menos circular, aunque buena parte del recorrido lo haréis yendo y volviendo por el mismo sitio. La segunda es que aparcar no es sencillo, sobre todo los fines de semana. Si bien es cierto que tendría más lógica hacerla desde el Monasterio de El Paular, nosotros os recomendamos ir directamente al aparcamiento de las Presillas de Rascafría. Es cierto que cuesta 9€, pero es la única alternativa viable en la zona.
Hechas las presentaciones, vamos a contaros cómo es esta ruta. Es larga, tal y como hemos dicho, pero a la vez resulta bastante sencilla. Además, es óptima incluso en meses de calor, ya que se va constantemente junto al río y hay mucha sombra. Quizá los únicos momentos a evitar sean cuando llueve o ha llovido, ya que se camina sobre rocas y el terreno podría ser muy resbaladizo.
Como ya hemos dicho, nosotros comenzamos en el parking de las Presillas. Ya sea al inicio o al final, os recomendamos dejaros caer por estas fabulosas piscinas naturales. Son una de las mejores «playas de Madrid», por lo que seguro que acabáis fascinados con sus tres pozas, su amplia pradera o simplemente con su animado chiringuito.
El camino a tomar es una pista de asfalto que sale desde las propias Presillas y que las bordea por arriba, dejándolas a mano derecha. No tiene pérdida, ya que durante toda la ruta veréis flechitas indicando que estáis en dirección a la Cascada del Purgatorio.
Antes dijimos que es una ruta perfecta para días de calor, lo cual de facto le convierte en una ruta perfecta para ir con perro. Eso sí, pensad también que buena parte del recorrido se hace por una zona ganadera, por lo que vuestro adorado cuadrúpedo debe ir atado. Si no, acabaréis teniendo problemas con las vacas y los terneros que pastan a sus anchas.
El primer tramo es lineal, hasta llegar a un cruce en el que hay que ir a mano derecha. Está bien señalizado, pero igualmente esa parte es circular (si decidís ir por la izquierda, luego podríais ir por la derecha). Nosotros optamos por hacer el recorrido en sentido inverso a las agujas del reloj, lo cual nos llevó a cruzar un puente y seguir el camino.
En un momento dado hay un giro muy abrupto (y a la vez bien señalizado) a mano izquierda. Se empieza ahí a ganar altura, lo cual os dejará unas vistas preciosas tanto del pueblo de Rascafría como del Monasterio de El Paular. Es quizá uno de los puntos más bonitos del recorrido, pues el bosque se vuelve un poco más cerrado y los árboles son impresionantes.
El camino os llevará a un puente, desde el cual es camino se vuelve lineal de nuevo. Desde ese punto os espera un kilómetro y medio hacia la cascada, el cual tendréis que retroceder por el mismo camino.
Esta parta también es muy interesante. Tras bordear una finca, iréis por una zona de rápidos y por un tramo en el que los pinos son la especie predominante. Recordad: siempre iréis con el río a mano derecha.
Los albores de las Cascadas del Purgatorio os ofrecerán varios saltos de agua, en los cuales parece que el camino ha terminado. Sin embargo, tenéis que seguir avanzando hasta llegar hasta una plataforma de madera, desde la cual tendréis el salto de agua principal ante vosotros. Hablamos de unos 15 metros de pura magia, que le convierten en una de las cascadas más bonitas de la Comunidad de Madrid. ¿Veis como el esfuerzo mereció la pena?
Si os vieseis con fuerza, se puede avanzar un poquito más por detrás de la cascada y ver otros saltos de agua. Eso sí, hay que trepar un poco y con perro se hace casi imposible, así que nosotros no pudimos continuar.
Ojo, que la ruta no acaba aquí. Ahora tenéis que retroceder el kilómetro y medio que hicisteis entre la zona del puente y las cascadas, y luego seguir a mano derecha. En ese punto iréis por una zona de bosque más tranquila, por la que incluso vimos un corzo en libertad (algo que lamentablemente no es ya tan habitual en la Sierra Norte).
Volveréis entonces al cruce de tierra que os dijimos al principio, retrocediendo hasta las Presillas. Allí podríais terminar vuestra ruta, pero os recomendamos ampliarla un poquito más. Y es que a 800 metros os espera el Bosque Finlandés, el secreto mejor guardado de Rascafría.
Tras visitar este pedacito del norte de Madrid, deberíais continuar hasta el Puente del Perdón, una joya en piedra que data del siglo XVIII. Es otro de eso lugares definitorios y definitivos, el cual suele protagonizar las portadas de las guías de viaje de la zona.
Y hablando de elementos de portada, si cruzáis el puente legaréis hasta el Real Monasterio de Santa María de El Paular, el primer monasterio cartujo de la corona de Castilla. Una auténtica pasada que bien haríais en visitar.
Por último, antes de volver al coche también sería interesante que pasaseis por otros puntos de interés en la zona. Allí tenéis el Arboreto Giner de los Ríos y el Centro de Educación Ambiental «Puente del Perdón». Si os sentís fuertes, a media hora a pie os espera el propio pueblo de Rascafría.
En cualquier caso, nosotros desde el monasterio volvimos al coche, completando la ruta en unos 14 kilómetros (un pelín más). Aprovechamos para tomar algo en el chiringuito de las Presillas, pues nos lo habíamos ganado tras semejante caminata.
Ficha técnica: cómo llegar, distancia y otros datos
📍 Punto de inicio: es una ruta circular, por lo que podéis empezar desde varios puntos. Lo más típico sería hacerlo desde el Monasterio de El Paular o desde el aparcamiento de las Presillas. Pese a que cuesta 9€/día, nosotros lo hicimos desde este último punto.
📏 Distancia / desnivel: es una ruta larga, que se va hasta los 14,25 kilómetros. El desnivel positivo es de 285 metros.
💪 Dificultad: vamos a ponerle dificultad media por la duración, ya que si nunca vais al campo acabaréis hechos polvo. Sin embargo, no tiene ningún tramo complicado.
⏲️ Duración: estuvimos 5 horas, aunque claramente se podría hacer en bastante menos. Tened en cuenta que paramos varias veces para que nuestro perro jugase en el río, que merendamos frente a las cascadas y que nos tomamos un refresco en las Presillas. Sin todas esas pausas, lo habríamos hecho en tres horas y media.
