La ruta de senderismo a Soda Springs os espera en el corazón del Tioga Pass, el sinuoso y espectacular trayecto que hay en el norte del Parque Nacional de Yosemite. Hablamos de una caminata de no más de una hora, en la cual podréis transitar por un paisaje moldeado por un antiguo glaciar. En él encontraréis estampas únicas, podréis contemplar fauna súper diversa y llegaréis hasta unos manantiales que brotan del suelo sin que todavía haya una explicación científica. No es uno de los puntos de interés más conocidos de Yosemite, pero os aseguramos que es una visita increíble.
El lugar más misterioso del Parque Nacional
El inicio de la ruta a Soda Springs no tiene pérdida si estáis recorriendo el Tioga Pass, ya que lo veréis claramente señalizado en la carretera. Hay un pequeño aparcamiento junto al trailhead, en el cual suele haber un puesto de información gestionado por los clásicos rangers de los Parques Nacionales de Estados Unidos.
Básicamente tendréis que cruzar la carretera e ir en paralelo a ella por un caminito que sale a mano izquierda. Tras caminar un par de minutos, veréis cómo hacia la derecha sale la senda principal: un ancho sendero de tierra marcado con piedras a los lados.
Este tramo tiene una distancia de unos 700 u 800 metros, durante los cuales tendréis ante vosotros una zona absolutamente espectacular. ¿Recordáis cuando erais pequeños y pensabais en la naturaleza? Aquí tendréis exactamente la misma imagen: montañitas, ríos, bosques, animalitos… Es increíble, es uno de esos espacios que se quedan grabados en la retina.
En seguida llegaréis al mítico Tuolumne Meadows Footbridge, un puente peatonal que os permitirá cruzar el río y llegar a la zona de las Soda Springs.
Más allá de que el puente es precioso, os recomendamos ir sin hacer mucho ruido y con los ojos bien abiertos. Y es que en la zona es relativamente frecuente ver castores, una de las especies que viven en Yosemite.
Tras cruzar el puente está la zona principal de la ruta. A modo de referencia, nosotros fuimos primero a mano izquierda, donde nos esperaba el Parsons Memorial Lodge, una cabaña construida en 1915 en honor a Edward Taylor Parsons. Hablamos de una figura clave para Yosemite, ya que este pionero luchó junto a John Muir por la conservación del Parque Nacional.
Al ladito está la McCauley Cabin, incluso más antigua que la anterior. Aunque en origen era privada, fue comprada por el Servicio de Parques Nacionales en 1973. Pone en valor las clásicas cabañas de madera que pueden encontrarse por todo el medio rural norteamericano.
A poco que tengáis suerte, por la zona podéis ver animales como ciervos u osos. Tened en cuenta que se asustan con facilidad y que pueden ser peligrosos respectivamente, por lo que tenéis que mantener la calma.
El elemento más peculiar de esta ruta (por algo le da nombre) es conocido como Soda Springs. Se trata de un manantial de aguas minerales que está rodeado de misterio, ya que los geólogos no son capaces de explicar el motivo por el que brotan estas aguas burbujeantes en medio de Yosemite. Teóricamente se puede beber de ellas, pero siempre existe la posibilidad de que las aguas hayan sido contaminadas previamente por una persona o un animal.
La zona con mayores fuentes de agua está protegida por una especie de cabaña de madera. No esperéis un géiser gigante, pero desde luego es algo de lo más curioso.
Desde ese punto, podéis cerrar una especie de círculo y volver hasta el Tuolomne Meadows Footbridge. Por el camino os acompañarán un montón de ardillas, las cuales saltarán de un lado a otro sin prácticamente inmutarse ante vuestro paso.
La verdad es que la ruta nos encantó. No en vano, en estos parajes surgió la idea de convertir Yosemite en un Parque Nacional, lo cual es muestra de la belleza (y también de la fragilidad) del entorno.
Ficha técnica: cómo llegar, distancia y otros datos
 Distancia 2,6 kilómetros en un recorrido de ida y vuelta. |  Desnivel 25 metros de suave desnivel. |  Dificultad Facilísima. |
 Duración Se tarda una hora. |  Punto de inicio Hay un pequeño aparcamiento junto al inicio de la ruta. |  Señalización Está bien señalizada y hay una carpa con rangers al inicio. |
 Época recomendada En invierno es inaccesible, ya que cortan Tioga Pass. |  Popularidad De las más populares de esta zona de Yosemite. |  Dog friendly No se puede hacer con perro. |
