Las Minas de Arditurri son uno de los principales destinos turísticos de Oarsoaldea, una comarca de la que ya os hemos hablado largo y tendido en el blog. En concreto, se encuentra en el término municipal de Oiartzun, un pueblo lleno de encanto y que os recomendamos encarecidamente visitar. Sin embargo, este artículo nos vamos a centrar en el antiguo coto minero, un lugar con más de dos milenios de historia y cuya visita os permitirá conocer de primera mano las entrañas de Euskadi.
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2000 años de explotación minera en las montañas vascas
A comienzos del siglo XIX, un ingeniero alemán especializado en minería visitó Arditurri y quedó absolutamente fascinado. Destacó fundamentalmente su tamaño, diciendo que ni con cuatrocientos hombres trabajando durante doscientos años se podrían haber horadado tantísimas galerías. Y la verdad es que no iba desencaminado, ya que los primeros trabajos en la zona comenzaron mucho antes.
En concreto, hay que remontarse unos 2000 años atrás, cuando el Imperio Romano estaba en una de sus etapas de mayor esplendor. Fue en ese momento cuando comenzó la explotación de Arditurri, creándose diferentes galerías que tenían por objetivo la extracción de plata.
Los romanos hicieron un trabajo excepcional, configurando una serie de oquedades que fueron tomadas como base en los siglos venideros. Claramente hoy en día no se trata de una mina romana pura y dura, ya que ha sido absolutamente transformada, pero haciendo la visita guiada podréis ver los elementos que diferencian una explotación imperial de una posterior.
De hecho, ese es uno de los objetivos principales de los recorridos que se hacen por el interior de Arditurri: mostrar cómo era una mina romana. El otro es enseñar a diferenciar diferentes filones de minerales, algo que sirve para poner en valor la riqueza y variedad del coto minero.
Así, hay registro de explotaciones continuadas durante la Edad Media (fundamentalmente destinadas a la extracción de hierro), en el siglo XVIII (en esa época buscaban plata y plomo) y en el XX (retomando de nuevo el interés por el hierro, debido a la expansión del ferrocarril). En las últimas décadas de explotación, entre 1960 y 1984, hubo un gran interés por conseguir fluorita, algo que hizo que las minas se modernizaran.
Finalmente, en el orwelliano año de 1984 todo llegó a su fin. Las minas ya no eran rentables y quedaron abandonadas, hasta que poquito tiempo después surgió el bonito proyecto de restaurarlas, ponerlas en valor y convertirlas en un elemento tanto educativo como turístico. Varias décadas después, Arditurri es un lugar más que consolidado, en el que se puede pasar un rato excelente y cuya visita os recomendamos encarecidamente.
Qué ver en las Minas de Arditurri y sus alrededores
Coto minero
El elemento estrella de todo el complejo es el coto minero: lo que vienen a ser las minas. Se trata de un kilométrico conjunto de galerías subterráneas, repartidas a lo largo de casi una decena de niveles distintos. En las visitas por el interior de Arditurri se accede únicamente a la segunda y a la tercera planta, ya que hacia abajo todo queda inundado.
Parketxe, el centro de interpretación
Antes o después de entrar a la cueva, pasaréis por el Parketxe. Ubicado en el antiguo laboratorio de las minas, se trata de un espacio multiusos que hace las veces de taquilla, tienda, punto de información y centro de interpretación. Allí os esperan paneles, elementos interactivos, un vídeo que explica la zona y la infinita sabiduría de sus trabajadores.
Exteriores
Los exteriores de las Minas de Arditurri son también dignos de mención. Por un lado hay una zona de picnic, repleta de bancos y mesas en los que poder pasar un buen día. Además, si os dais un paseo por la zona podréis comprobar cómo existen otras muchas explotaciones mineras, solo que en este caso están al aire libre.
Vía verde
Por último, no podemos dejar de hablar de la estupenda vía verde de Arditurri, un recorrido de 7 kilómetros que comunica las minas con el propio pueblo de Oiartzun. Pasa junto a otros lugares importantes de la localidad, como el Centro de Interpretación Geológica o el Centro de la Música Popular, por lo que puede ser un paseo perfecto para alimentar cuerpo y alma.
Una mina, tres tipos de visita
Es importante que tengáis en cuenta que únicamente se pueden visitar las Minas de Arditurri mediante visita guiada. El acceso libre está restringido por cuestiones de seguridad y conservación, pero podéis visitar el complejo a diario a través de diferentes opciones.
Visita esencial
En primer lugar, la visita esencial tiene una duración de una hora y un coste de 5,82€ por persona. Se hace dos veces al día: a las 11:00 en euskera y a las 13:00 en castellano. Es idónea para hacer una primera aproximación al lugar, ya que recorre los 180 metros de la pasarela adaptada que hay en el segundo nivel y recorre algunas de las zonas más emblemáticas de Arditurri.
La mina a fondo
Si queréis hincarle más el diente al lugar, La mina a fondo es vuestra mejor opción. También se hace dos veces al día (a las 10:00 en castellano y a las 12:00 en euskera), pero tiene un coste superior: 8,09€ por persona. Dura una hora y cuarto, tiempo que se emplea en recorrer los mismos espacios que la visita esencial y para posteriormente descender al tercer nivel. En nuestra opinión, es la mejor alternativa para conocer el sitio.
La mina y el Tren Verde (solo temporada alta)
Si tenéis la suerte de ir en verano, también tendréis a vuestra disposición La mina y el Tren Verde, es un recorrido de más de 4 horas. Os permitirá conocer un segundo museo en la zona, además de recorrerla acompañada de los estupendos guías de Arditurri.
Nuestra experiencia visitando Arditurri
Vamos a contaros ahora cómo fue nuestra experiencia, la cual ya os adelantamos que resultó estupenda. Lo primero fue llegar al aparcamiento, el cual os dejamos aquí marcado en Google Maps:
El aparcamiento está a unos 300 metros del Parketxe, que es el punto de recepción de visitantes. Para llegar hasta él, tan solo hay que ir por un camino que está claramente señalizado.
Aunque mucha gente va sin reserva, os recomendamos haceros con las entradas con antelación, ya que los turnos pueden variar o llenarse. Para ello, podéis hacerlo directamente en la web oficial de Arditurri o llamando a la Oficina de Turismo de Oiartzun (943 494 521).
Cuando llegamos allí, fuimos a la taquilla. Teníamos tickets para la visita esencial, pero como éramos los únicos que teníamos reserva (era un día raro) nos ofrecieron hacer la visita más larga.
Tras pagar, nos pusieron un vídeo y comenzaron las explicaciones. Primer en el exterior de la mina, hablando del Parque Natural de las Peñas de Aya y de cómo es la geología del mismo.
Tras una pequeña introducción, cruzamos la puerta de la mina, nos pusieron los cascos y nos adentramos en el subsuelo. Fue una visita súper interesante, en la que pasamos por lugares absolutamente increíbles y que no se hizo agobiante en ningún momento. Tampoco es exigente a nivel físico, ya que apenas se recorre un kilómetro.
Como ya hemos dicho antes, la visita tiene dos objetivos principales: mostrar cómo fue la excavación en época romana y enseñar a diferenciar diferentes tipos de minerales. No solo consiguieron ambas cosas, sino que por el camino aprendimos muchísimas cosas sobre geología, espeleología e historia de la zona. ¡Lo más de lo más!
Visitamos el segundo y el tercer piso, siempre acompañados de las magníficas explicaciones de nuestro guía. Solo éramos nosotros dos en la visita, así que fue absolutamente a medida (se explayó más en los temas que vio que nos interesaban).
El balance de la experiencia en las Minas de Arditurri no pudo ser mejor. No solo nos dio cobijo en un día de lluvia (algo de agradecer, porque en el interior de la cueva se estaba estupendamente bien), sino que nos hizo ver con otros ojos uno de nuestros lugares favoritos de Euskadi.
Información práctica
¿Dónde están las Minas de Arditurri?
Las Minas de Arditurri están en el término municipal de Oiartzun. En concreto, en la Arditurri Bidea 3. Llegar es muy sencillo, aunque el aparcamiento os dejará a unos 300 metros.
Horarios
Durante todo el año, la cueva puede visitarse en cuatro turnos: 10:00, 11:00, 12:00 y 13:00. El primero y el segundo son en castellano, los otros dos en euskera. Además, en verano pueden ofrecer más turnos.
Tarifas
La visita corta cuesta 5,82€ por persona, la larga 8,09€ por persona.
¿Se pueden visitar las Minas de Arditurri con perro?
Lamentablemente no. Esto no es algo solo de Arditurri, sino en general de todas las cuevas. Los perretes se suelen poner muy nerviosos, es frecuente encontrarse con animales que lo pueden poner todo patas arriba (como murciélagos) y no siempre se camina con facilidad.
Consejos generales para la visita
Por último, vamos con unos cuantos consejos generales para visitar las Minas de Arditurri:
- Por muy buen tiempo que haga fuera, llevad ropa de abrigo. En el interior de la cueva hay una temperatura baja constantemente (no os moriréis de frío, pero llevad manga larga).
- Evitad el lugar si tenéis claustrofobia o no os gusta andar apretados, ya que no deja de ser una cueva.
- Llevad calzado cómodo.
- Conviene reservar tickets con antelación. En cualquier caso, hay que llegar al menos 15 minutos antes de que empiece la visita.
- Arditurri es la punta de lanza de un entorno mucho más amplio y diverso. No os limitéis a ver la cueva y explorad Oarsoaldea de punta a punta: os prometemos que no os defraudará.
