Naturaleza increíble, plató de rodaje de producciones internacionales, potencia gastronómica… son muchos los ases que hay debajo de la manga de Zumaia, uno de los pueblos más turísticos de Urola Kosta y de todo el País Vasco en general. Es un lugar fascinante, de esos que siempre son portada en las guías de viaje y que hay que visitar varias veces en la vida. Fruto de diferentes viajes, aquí os traemos una guía en la que os enseñamos qué ver y qué hacer en este destino imprescindible.
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Un plató que va de Ocho Apellidos Vascos a Juego de Tronos
Zumaia (en castellano y en desuso Zumaya) es un pueblo que apenas llega a los 10.000 habitantes, pero cuya fama rebasa claramente su tamaño. Seguro que lo habéis visto en la pantalla de vuestro televisor, ya que ha ofrecido su magnífica belleza para producciones de la talla de Ocho Apellidos Vascos (la película española más taquillera de la historia) o Juego de Tronos (la serie emblema del gigante HBO). ¡Ahí es nada!
No es casualidad que la localidad sea escenario habitual de rodaje, ya que cuenta con un casco histórico maravilloso. Además, en su término municipal se encuentra el archiconocido flysch de Zumaia, una de las formaciones geológicas más relevantes del planeta. Todo lo anterior genera una propuesta turística de primer nivel, a la cual le acompañan museos, tiendas y restaurantes.
La nota negativa de todo esto es que aparcar en Zumaia es muy complicado. Podéis olvidaros de algo mínimamente céntrico (incluso muchas calles tienen restringido el tráfico a vecinos), pero es que los aparcamientos para visitantes están a unos quince minutos a pie. Aun así, os aseguramos que el paseo merece la pena.
Turismo en Zumaia
Casco viejo
El casco histórico de Zumaia está bien rodeado de espacios naturales. Hacia el este están el puerto y una playa, al norte la otra playa, al oeste el famoso flysch y al sur unas montañas absolutamente increíbles. Vamos, que allá donde miréis tendréis naturaleza. Aun así, vamos a empezar la visita centrándola en la zona urbana, que también es una pasada.
Iglesia de San Pedro
Aunque el centro del pueblo está repleto de edificios religiosos, hay uno que destaca de manera notable: la Iglesia de San Pedro. Es uno de los edificios más antiguos de Zumaia, ya que todo parece indicar que fue erigida en el siglo XIV, tras la fundación de la villa. El hecho de que tenga más aspecto de fortaleza que de templo indica los complicados momentos en los que se puso en marcha.
Palacio Zumaia
No muy lejos de ella está el Palacio Zumaia, uno de los más interesantes del casco viejo. Esta antigua casa solariega toma nombre de los Zumaia Ganboa, una de las familias más poderosas de la villa durante muchos siglos. Aunque está muy transformada, en su fachada todavía se pueden contemplar elementos que nos trasladas al siglo XV, como el arco apuntado de la puerta.
Casa-Palacio de Olazabal
Un paseo lógico por el centro os debería llevar también hasta la Casa-Palacio de Olazabal, secretario del rey Felipe IV. Su fachada principal es excelente, llevando la sillería de arenisca a otro nivel. Tiene dos escudos de piedra caliza incrustado entre los tres balcones.
Convento de San José
La blanca fachada del Convento de San José debería ser vuestra siguiente parada. Fue fundado en 1609 por una devota que cedió su propia casa para tal fin, siendo uno de los primeros conventos carmelitas de Euskadi en seguir las reformas de Santa Teresa. ¡Sobriedad ante todo!
Ayuntamiento
Y junto al convento encontraréis el Ayuntamiento de Zumaia, una casa consistorial típica de la zona a más no poder.
Palacio de Ubillos
Siguiendo con la visita, el Palacio de Ubillos (cuyo nombre le viene dado por la familia que lo poseía) destaca por tener dos torres. En origen solo era una, pero en el siglo XVI se amplió el edificio y se convirtió en un palacio de grandes dimensiones. Es la sede de la Escuela de Música de Zumaia.
Andra Mari de Arritokieta
Para rematar la visita al casco viejo, se antoja imprescindible la mención a Andra Mari de Arritokieta. No es céntrica como tal, pero llegaréis tras escasos 5 minutos a pie. En el interior de este templo se encuentra la imagen de la patrona de Zumaia.
Playa de Itzurun
El extremo noroeste del casco viejo de Zumaia va a parar a la Playa de Itzurun, una de las más espectaculares de Euskadi y de la Península Ibérica. Llegar a ella desde el pueblo no tiene complicación: básicamente hay que ir en dirección al centro de talasoterapia Zelai Zumaia y continuar hacia la playa. Desde los laterales es otro cantar, ya que hay unos acantilados con más de 150 metros de caída.
La playa es absolutamente brutal. Casi 300 metros de fina arena, golpeada habitualmente por fuertes olas (es perfecta para hacer surf) y pintoresca a más no poder. A poco que vieseis Juego de Tronos, la reconoceréis por las últimas temporadas. Aquí se ambienta buena parte de Rocadragón, siendo fácil ver escenas en las que personajes tan emblemáticos como Tyrion Lannister transitan por ella.
Ermita de San Telmo
¿Os ha fascinado la playa? Ahora levantad la vista. Sobre ella hay una pequeña iglesia, a la cual se llega tras una caminata de un cuarto de hora aproximadamente. Es la Ermita de San Telmo, de la cual existen referencias desde el año 1540. Su santo es el patrón de los marineros, algo que no es extraño teniendo en cuenta su ubicación frente al mar: era lo último que veían al alejarse de Zumaia y su primera visión al regresar.
También es fácil de reconocer en el cine, ya que en ella (SPOILER) se casaban Amaia y Rafa al final de Ocho Apellidos Vascos. ¡Preciosa a más no poder!
Flysch de Zumaia
¿Seguís fascinados? En ese caso llegó el momento de prestar atención a los acantilados que hay antes, durante y después de la Playa de Itzurun. Es el famoso flysch de Zumaia, un tesoro natural en el que se puede identificar la historia geológica de nuestro planeta durante los últimos millones de años.
En la Oficina de Turismo se organizan visitas a pie y en barco para aprender más sobre esta formación geológica. Merece la pena incluso visitarla aunque no entendáis nada, ya que es preciosa y muy fotogénica.
¡Todo lo demás!
Con todo lo anterior estaría lista una visita a lo más céntrico de Zumaia. Con media jornada sería suficiente para verlo todo, pero si tenéis un día completo podéis ampliar la visita y exprimir al máximo todo lo que tiene su término municipal. Así, imprescindible que vayáis al Palacio de Foronda o a la Ermita de Santiago, así como que visitéis museos como el Centro de Interpretación «Algorri» o el Museo Beobide. También tenéis relativamente cerca el Faro de Zumaia o la Playa de Santiago, mucho más tranquila que la de Itzurun.
