Sortland es la ciudad más grande de todas las islas Vesteralen. No os imaginéis una mega urbe, ya que apenas pasa de los 5000 habitantes, pero sí es cierto que no encontraréis una cosa igual en todo el archipiélago. En este artículo os contamos nuestras impresiones tras una breve visita a la ciudad azul junto al estrecho, que así es como se la conoce coloquialmente.
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De centro religioso a comercial
Los orígenes de Sortland no podrían ser más humildes. Etimológicamente, su nombre hace referencia a una antigua granja. En esta es donde se construyó la primera iglesia del pueblo, en plena edad media, alrededor de la cual empezó a florecer todo.
Precisamente, la presencia de esa iglesia hizo que el pueblo comenzase a tener algunos privilegios fiscales, algo que a la postre haría que emergiese una gran actividad comercial. Así fue creciendo la urbe, de manera sencilla pero constante.
Ya en el siglo XX, varias empresas familiares llevaban décadas operando en Sortland. Así fue como se configuró el centro comercial de la ciudad. No en el sentido de un recinto cerrado, sino una larga calle en la que artesanos y productores daban salida a su producto.
Esa estructura urbana, aunque modernizada, se ha mantenido a día de hoy. Las calles paralelas al mar, por las cuales se puede transcurrir tanto a pie como en coche, ofrecen al viajero un montón de tiendas en las que poder hacer compras. Hay más cosas para ver, pero sin duda el shopping es una de las actividades principales de Sortland.
Turismo en Sortland
Iglesia
No está en el centro (tendréis que parar antes o después de visitarlo), pero la Iglesia de Sortland (Sortland Kirke) es un edificio lleno de interés. Fue construida a comienzos del siglo XX (año 1901, para ser más exactos) y tiene la capacidad de albergar hasta casi 700 personas.
El lugar lleva siendo sagrado desde la Edad Media. De hecho, hay documentos que hablan de la existencia de otras iglesias allí en 1381, en 1676 y en 1803. Sea como fuere, el edificio actual es uno de los más monumentales de esta zona de Noruega.
Arquitectura popular
A Sortland se le conoce como la ciudad azul porque cuenta con unas cuantas casas pintadas de ese color, ya sea total o parcialmente. La verdad es que nosotros no vimos tantos como esperábamos, pero es innegable que es uno de sus grandes atractivos turísticos. Aun así, no esperéis el típico lugar añejo y con construcciones antiquísimas. Hay algunos edificios por la zona del puerto que datan de mitad del siglo XIX, pero no mucho más.
Puerto
Precisamente, ya que hablamos de él, el Puerto de Sortland también es una visita obligada. Es un sitio súper ajetreado y lleno de detalles.
Casa de la Cultura (Kulturhaus)
A día de hoy, la principal referencia es la Casa de la Cultura o Kulturhaus, un edificio de vanguardia que ofrece eventos y exposiciones durante todo el año.
Shopping
En cualquier caso, el pasado comercial de Sortland está muy arraigado y hoy en día el shopping es una de las cosas principales que podéis hacer visitando la ciudad. Allí tenéis todo tipo de tiendas de artesanía, moda y souvenirs esperando a vaciar vuestras carteras.
