Qué ver en Mirmande, el maravilloso pueblo en medio de una colina de frutales

Mirmande es uno de los lugares más mágicos de la región de Auvernia-Ródano-Alpes. Puede que no sea tan conocido como las grandes ciudades de Lyon o Grenoble, ni tan turístico como Annecy o Chambéry, pero este pueblo es uno de los conjuntos medievales más bonitos de toda Francia. Seguid leyendo, porque tenéis ante vuestros ojos la típica joyita que todavía no ha sido capturada por el turismo de masas.

Un pueblo cargado de maravillas

A medio camino entre la Costa Azul de Francia y la frontera occidental de Suiza, Mirmande es un lugar perfecto para hacer una parada si estáis haciendo un road trip por la zona y queréis hacer una parada sin alejaros mucho de la autopista. Al fin y al cabo, está a dos horas de Montpellier y a tres de Ginebra, por lo que su ubicación no podría ser más propicia.

El pueblo está en lo alto de una suave colina, colonizando todo su espacio a base de estrechas y laberínticas callejuelas medievales. Su nombre proviene de dos palabras latinas, mirus y mandare, que vienen a significar algo parecido a «lugar cargado de maravillas». No os sorprenderá que la localidad se encuentre en la lista de Los Pueblos Más Bellos de Francia.

Fachadas de piedra, árboles, miradores al espectacular Valle del Drôme… y cuestas, muchas cuestas. No vamos a decir que sea un lugar impracticable, pero desde luego deberíais poneros calzado cómodo si vais a dedicaros a recorrer este bonito pueblo.

La visita es muy fácil. Hay un gran aparcamiento justo a la entrada, desde donde tendréis a tiro la Oficina de Turismo y un panel informativo con todo lo que ver en Mirmande.

Turismo en Mirmande

Iglesia de San Pedro (Église Saint-Pierre)

En la parte baja del pueblo, justo al lado del aparcamiento, encontraréis el primer punto de interés:la Iglesia de San Pedro. Construida en 1845, es el lugar de culto en el que se celebran las misas del día a día en Mirmande.

Arquitectura popular

Sin embargo, en cuanto avancéis un poquito os daréis cuenta de la absoluta maravilla que tenéis ante vosotros. El casco histórico de Mirmande es una auténtica pasada: con el tamaño justo para poder perderse en sus calles, pero sin ser agobiante. Por doquier veréis casas llenas de encanto, con fachadas increíbles, torrecitas, arcos… ¡Lo más de lo más!

Para que no os perdáis nada de nada, tenéis que tener claras dos referencias. Si miráis al casco viejo según entráis en él, a mano izquierda tenéis la Rue du Boulanger. Caminando por ella iréis por la falda de la colina, con unas vistas sensacionales. Desde ella podéis acometer la subida hacia la zona alta, aunque dando un poquito de vuelta.

Por el contrario, si queréis subir de una manera más directa, la Grand Rue es la opción indicada. Mucho más inclinada, pero también repleta de auténticos edificios medievales.

En vuestro paseo veréis elementos clave en la vida rural europea: establos, hornos de pan, palomares… Todas esas estructuras han llegado hasta nuestros días, incluyendo algunas no tan habituales, como una fábrica para criar gusanos de seda.

Lo que está claro es que Mirmande es un auténtico laberinto. Nosotros fuimos siguiendo el mapa turístico y tirando de Google Maps, pero aun así nos perdimos unas cuantas veces. Sin embargo, tenemos que reconocer que fue bastante guay no encontrar las cosas de buenas a primeras, ya que gracias a eso descubrimos un montón de rincones súper chulos.

Recinto amurallado

Mención aparte merece todo aquello que esté relacionado con el recinto amurallado de Mirmande. Se ha conservado a las mil maravillas una enorme serie de muros, torreones, puertas y caminos de ronda. Muchos están identificados claramente en el mapa turístico, pero otros aparecerán ante vosotros sin previo aviso.

La Capitelle

La belleza de Mirmande ha atraído a propios y extraños desde hace ya mucho tiempo. Uno de sus visitantes más influyentes fue André Lhote, pues el escritor y pintor cubista contribuyó de manera activa a convertir el pueblo en un punto de interés cultural. Podéis seguir sus pasos en La Capitelle, ya que este hotel-restaurante fue su primera casa en la ciudad.

Capilla de Santa Lucía (Chapelle Sainte-Lucie)

Fuera de la muralla está la Capilla de Santa Lucía, un templo muy querido por los habitantes de Mirmande. Al fin y al cabo, fue construido a base de donaciones particulares a finales del siglo XIX.

Iglesia de la Santa Fe (Église Sainte-Foy)

Sin embargo, el lugar más emblemático de Mirmande en materia de religión es la Iglesia de Santa Fe. Es un templo románico del siglo XII, que ha llegado hasta nuestros días casi de milagro. Ha experimentado varias remodelaciones, pero en cualquier caso luce de maravilla.

Está en lo alto del pueblo. Subir requiere lidiar con innumerables cuestas, pero os aseguramos que merece la pena: por su bonita torre-campanario, por sus capiteles, por la capilla sur del siglo XV… Son muchos los motivos por los que este edificio se encuentra entre nuestros favoritos.

Por cierto, justo al lado está el cementerio, que tiene unas vistas sensacionales hacia el valle.

Puerta de los Gaultiers (Porte des Gaultiers)

Una vez terminéis con la zona alta, podéis seguir callejeando. Eso sí, hay un par de elementos que no queremos dejar de mencionar. El primero es la Puerta de los Gaultiers, que lleva formando parte del recinto amurallado desde el siglo XV. Tiene un bonito fresco en la bóveda que fue restaurado en el año 2012.

Torre de Bagnard (Tour du Bagnard)

No muy lejos de allí, tras atravesar la Grand Rue, llegaréis a la Torre de Bagnard. Fue lo último que vimos después de nuestro largo recorrido por Mirmande.

Aperitivo con vistas al Valle del Drôme

Por cierto, para nosotros este pueblo supuso la última parada de un largo viaje por Suiza en furgoneta. Visitamos Mirmande ya de vuelta a casa, con la intención de hacer una parada en Francia y así no hacer todo el recorrido del tirón. Andábamos algo ñoños, pero encontramos el lugar perfecto para dar rienda suelta a toda esa melancolía: Le Pechoire, una bonita terraza en la que tomar algo con vistas al Valle del Drôme. Una experiencia 100% recomendable.

¿Qué te ha parecido?
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *