El especial de programas de viaje en la televisión de España nos lleva hoy a Un País para Comérselo, el programa que mezclaba turismo y gastronomía por todo el territorio español. Estuvo presentado por los tres rostros más representativos del elenco de Cuéntame: Imanol Arias, Juan Echanove y Ana Duato.
Viajes gastronómicos por España con la familia Alcántara
La premisa de Un País para Comérselo era clara: recorrer los principales destinos turísticos de España y mostrarlos a través de su propuesta gastronómica. ¡No se nos ocurre una propuesta mejor que esa!
El programa tuvo 47 episodios, emitidos entre 2010 y 2014. Se repartieron en cuatro temporadas: las dos primeras fueron presentadas por el tándem formado por Imanol Arias y Juan Echanove, mientras que las dos siguientes estaban protagonizadas por Ana Duato. No es casualidad que fuesen, respectivamente, Antonio Alcántara, su hermano Miguel Alcántara y su mujer Merche: tres de los protagonistas de Cuéntame Cómo Pasó, la serie más longeva en la historia de la televisión española.
Aunque Un País para Comérselo empezó súper bien en términos de audiencia (casi dos millones y medio de espectadores de media, con una cuota de pantalla cercana al 20%), temporada a temporada se fue desinflando. Sin embargo, la calidad del programa no bajó en absoluto y sus casi medio centenar de entregas son una auténtica delicia (nunca mejor dicho).
Con la anécdota por bandera
Cuando hablamos de Dutifrí destacamos su enfoque absolutamente personalista, pero es que Un País para Comérselo no se queda atrás. Las dos primeras temporadas lo fían absolutamente todo al carisma de Arias y Echanove, ofreciendo el primero un perfil mucho más curioso y el segundo mostrándose como un auténtico glotón.
De este programa nos gustó especialmente que no se centraba únicamente en los típicos restaurantes top, sino que también visitaba tascas de las de toda la vida. Incluso dedicaba mucho tiempo a ir a residencias particulares y mostrar cómo se cocinaban las recetas tradicionales.
Con el cambio de presentadores, el liderazgo del programa adquirió un perfil mucho más moderado (nada tiene que ver el carácter socarrón e irónico de los Alcántara con la finura de Ana Duato). Sin embargo, también se hizo mucho más profundo, mostrando la gastronomía española como lo haría una madre o un padre.
En cualquier caso, los 47 programas le dan una importancia máxima a las anécdotas personales: cómo se transmite una receta de generación en generación, el truqui que se utiliza en una casa concreta para darle sabor a un plato, cómo un restaurante pasó de ser uno más a llenarse cada fin de semana… Habrá a quien no le guste, pero nosotros disfrutamos un montón con este programa.
