Svartaslingan es una ruta que transcurre por el extremo sureste del Parque Nacional de Hamra. Sale desde Svartaentrén, la entrada menos concurrida de las tres que tiene este espacio protegido. Si la realizáis, podréis seguir las huellas del río Svartan, contemplando pequeñas cascadas y lagunas que se van formando al paso del río. El último tramo puede hacerse un poco dificultoso, ya que hay tendréis que «trepar» sobre cantos rodados, pero con paciencia y unos buenos palos de andar podréis realizarla sin problemas.

Siguiendo los pasos del río Svartan
Una vez hayáis aparcado en Svartaentrén, lo primero que tenéis que tener claro es que la ruta tiene dos opciones:
- Versión larga: dos kilómetros, una hora.
- Versión corta: un kilómetro, cuarenta minutos.
Eso en teoría, ya que ahora veréis que nosotros tardamos algo más. De hecho, al hacer la versión larga nuestro reloj marcó 2,65 kilómetros, lo cuales los completamos en una hora y cuarto.

Pero no nos adelantemos y vayamos al principio de todo: llevad calzado cómodo, palos de andar y mucha agua. Es una ruta sencilla, pero tiene su cosa si no vais equipados.
El primer tramo es en paralelo al río. Lo primero que veréis son unos rápidos y un pequeño refugio, en una zona que es bastante bonita.

En todo momento tenéis que ir siguiendo las señales naranjas. Tenéis que ir muy atentos, ya que cuando se adentra en el bosque el camino no es tan obvio como pudiera parecer.

Por cierto, la ruta está repleta de arándanos muy gordos (se nota que es un recorrido poco transitado) y de una gran variedad de setas.
Tras cruzar un puente de madera, llegaréis a la zona en la que la ruta se puede acortar. Eso sí, ojito que el cruce es confuso: indica que hay un mirador a 100 metros como si fuese un desvío, pero en realidad es por donde continua la ruta normal. Si no vais con atención acabaréis haciendo el recorrido completo queráis o no.

En cualquier caso, merece la pena hacer la versión larga. Así llegaréis hacia una zona de cantos rodados y rocas, sobre los cuales tendréis que caminar con mucho cuidado, ya que son un poco zamburguesas.
Hay mucho barro en ese último tramo. Además, las aguas están marrones (son un poco ferruginosas), por lo que si no lleváis calzado adecuado acabaréis tan mojados como manchados.

Desde el punto más alejado de la ruta hasta el aparcamiento se vuelve fácil, pero a la vez diremos que las indicaciones no fueron del todo precisas. Hicimos algo más de recorrido del marcado (se suponía que eran 2 kilómetros y finalmente fueron 2,65). Tened esto en cuenta a última hora, ya que si apuráis mucho la tarde lo mismo se os hace de noche.
Sea como fuere, es una ruta estupenda. El Parque Nacional de Hamra es una pasada, no dejéis de visitarlo si tenéis oportunidad.

Ficha técnica: cómo llegar, distancia y otros datos
📍 Punto de inicio: la ruta empieza desde Svartaentrén, la ruta más al sur de Hamra. Es la menos concurrida.
📏 Distancia / desnivel: según el folleto, hay una opción de 2 kilómetros y otra de solo 1. Nosotros la hicimos al completo, pero el GPS marcaba algo más (2,65 kilómetros). El desnivel fue de 70 metros.
💪 Dificultad: es una ruta fácil en apariencia, pero se camina sobre terrenos embarrados e incluso encharcados. Conviene ir con unas buenas botas y, si es posible, con palos de andar. El último tramo tiene todo el desnivel, incluso hay que trepar un poco entre rocas.
⏲️ Duración: teóricamente la versión larga dura una hora y la corta 40 minutos. Sin embargo, nosotros tardamos un cuarto de hora más en hacer la ruta completa. No sabemos si fue por el barro, pero el caso es que es algo a considerar en caso de que vayáis a hacer el recorrido a última hora del día. No parece buena idea que se os eche la noche encima en un lugar en el que hay osos.
