Dado que está justo en el medio, si hacéis un viaje por las repúblicas bálticas acabaréis yendo a Letonia de un modo o de otro. Junto con sus vecinos de norte y sur (Estonia y Lituania, respectivamente) forma un excelente destino para un viaje de diez o doce días. Eso sí, en este artículo queremos cederle todo el protagonismo a las tierras letonas y contaros todo lo que vimos e hicimos en nuestro paso por allí. Seguid leyendo y os enseñamos esta estupenda ruta en furgoneta, en la cual dedicamos cuatro días a recorrer los principales destinos de Estonia.
Tabla de contenidos
Introducción: el del medio de las bálticas
Poco o nada sabíamos de Letonia antes de ir allí. Que los 12 points se dan desde Riga, que es el que está en el medio de las repúblicas bálticas y para de contar. Precisamente por eso nos sorprendió tanto, pues encontramos un destino que fue directo a nuestro corazoncito.
Pese a que su devenir histórico está marcado por infinitos conflictos (incluyendo la ocupación nazi en la II Guerra Mundial y casi medio siglo bajo el paraguas de la URSS), hasta nuestros días han llegado letones y livonios, los pueblos autóctonos de la zona. Eso ya explica el marcado carácter de la población local, además de lo mucho que valoran sus tradiciones.
Visitar Letonia es relativamente fácil, ya que es un país chiquitito y bien comunicado. Su capital, Riga, está en el centro de absolutamente todo. De hecho, como máximo en tres horas de coche es posible llegar a cualquier punto del país.
¿Qué puede esperar un viajero de Letonia? Ciudades medievales, enormes espacios naturales (incluyendo la cascada más ancha de Europa) e increíbles playas en la costa del Mar Báltico. Todo ello salpicado por un folclore absolutamente increíble, posiblemente el que más personalidad tiene de la zona.
Qué ver en Letonia
Cuatro días en Letonia dan para mucho, la verdad. Siempre se quedarán cosas por ver, ya que las repúblicas bálticas tienen infinitas posibilidades pese a sus reducidas dimensiones. Sin embargo, si aprovecháis bien vuestro tiempo podréis ver tantas cosas como nosotros:
Liepaja: entramos a Letonia por el suroeste, viniendo en carretera desde Klaipeda. Posiblemente es el lugar más asociado a la música y a la cultura en general que hemos visitado en nuestra vida. Tiene una bonita ruta circular en la que hay que ir siguiendo notas musicales en el suelo, a través de la cual se pueden visitar sus principales puntos de interés.
Kuldiga: a una horita de allí está Kuldiga, uno de los pueblos más bonitos de toda Letonia. En el año 2007 recibió el premio EDEN al turismo rural emergente, gracias a que ha sabido conservar a las mil maravillas la esencia de las pequeñas urbes del interior letón.
Además, en su término municipal encontraréis Ventas Rumba, la cascada más ancha de todo el continente Europeo. ¡Todo un dos por uno!
Parque Nacional de Slitere: la visita a este espacio natural es, en nuestra opinión, absolutamente imprescindible. Allí os esperan enormes y preciosas ciénagas en las que las setas brotan por miles, la tumba de un hombre lobo, un cementerio de barcos abandonados e incluso un museo de astas de ciervo. Eso por no hablar de sus increíbles playas.
Riga: otro punto imprescindible. La capital de Letonia es vibrante y tiene patrimonio suficiente como parar mirar de tú a tú a París, Roma o Berlín. Enormes iglesias, algunos de los mejores museos del Báltico y parques infinitos es lo que os espera en esta bonita ciudad.
Parque Nacional de Gauja: por último, no podéis dejar de visitar este enorme espacio protegido. Y no tanto por la naturaleza en sí (que también), sino por sus tremendas fortalezas. Allí podéis visitar tanto el Castillo de Cesis como la Ruta de los Castillos de Sigulda, Krimulda y Turaida.
Mapa turístico
Para ayudaros a situar todo esto y que preparéis fácilmente la visita, aquí os dejamos un mapa turístico de Letonia.
Documentación, vacunas y otros trámites
Como Letonia forma parte de la Unión Europea desde el año 2004, no hace falta visado, ponerse vacunas ni nada raro. Estar allí es como estar en España a todos los efectos: usan el euro, con el DNI podréis entrar en el país y no necesitáis un permiso especial para conducir por sus carreteras.
Transportes
Cómo llegar
Se puede llegar por avión a Riga, que está justo en el centro del país. Eso sí, como es muy frecuente recorrer las repúblicas bálticas en coche, no es extraño llegar desde Lituania (por el sur) ni desde Estonia (por el norte).
Cómo moverse
Si os vais a mover en transporte público, hay algo bueno y algo malo. La noticia positiva es que desde Riga es facilísimo llegar a cualquier parte, pero la noticia negativa es que para moverse entre muchos sitios hay que pasar por la capital.
Nosotros íbamos en nuestra propia furgoneta, así que no tuvimos ningún problema. De hecho, acabamos encantados con las carreteras letonas, pues nos movimos por el país de norte a sur y de este a oeste y no tuvimos ningún problema.
Gastronomía
La gastronomía letona está muy marcada por sus productos agrícolas, por un amplio consumo de carne y también por el pescado procedente del Mar Báltico.
La principal peculiaridad es que conviven dos tipos de gastronomía típica local, ya que hasta la actualidad han llegado tanto el pueblo letón como el livonio. Por eso, no deberíais iros de allí sin hincarle el diente a ambas propuestas.
Compras / souvenirs
Letonia, como el resto de las repúblicas bálticas, no es precisamente el paraíso de las compras. Sin embargo, hay un material que destaca por encima del resto: el ámbar. Seguro que os acabáis haciendo con alguna pieza dorada, ya sea en tiendas de souvenirs o en puestecitos de artesanía.
Alojamiento
Letonia es un país con una oferta amplia, variada y con una excelente relación calidad/precio. Nosotros íbamos con la furgo y solo podemos opinar de campings y áreas para autocaravanas, pero también vimos precios de alojamientos convencionales y no estaban nada mal.
Seguridad
Por supuesto, Letonia es un destino absolutamente seguro. Estar por allí es exactamente igual que viajar a Francia o a Bélgica: hay que evitar las zonas chunguis de las grandes ciudades, no confiarse cuando se está en medio de la nada y poquito más.
Nosotros visitamos el país de cabo a rabo y no sentimos inseguridad en ningún momento. De hecho, de vez en cuando vimos policía y no tuvimos ningún incidente, pese a que en internet habíamos leído que a veces se animan a pedir dinero a los viajeros.
Consejos finales
Resumiendo: Letonia es un sitio súper guay. Es un destino muy variado, en el que todo está cerca y con una profundidad cultural de primer nivel. Os recomendamos un montón ir al país, ya sea como un viaje en sí mismo o como parte de una ruta por las repúblicas bálticas.