Hay tanto que ver en Pontedeume que es uno de los destinos más populares de la provincia de A Coruña. Sus calles y sus plazas ofrecen al viajero lo mejor de la arquitectura tradicional gallega, con soportales, fuentes de piedra y magníficas galerías acristaladas. La localidad también puede presumir de ofrecer al viajero muchos edificios singulares, además de una propuesta gastronómica magnífica y excursiones de categoría en los alrededores.

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Un paraíso en el corazón de las Rías Altas
Pontedeume se fundó desde cero en 1270, gracias a una carta puebla de Alfonso X el Sabio. El monarca tenía claro que era importantísimo tener un núcleo de población de relevancia a orillas del río Eume, por lo que impulsó su desarrollo y rápidamente se convirtió en un lugar estratégico.
Muchas familias importantes pasaron por allí, siendo los Andrade los que más huellas han dejado en sus calles y plazas. Sea como fuere, hablamos de un lugar que se ha movido en la abundancia de manera constante a lo largo de la historia, por lo que su casco urbano es prácticamente un museo de arte y arquitectura al aire libre.

La visita a Pontedeume es sencilla, en una mañana o en una tarde se hace sin problemas. Eso sí, aparcar no siempre es sencillo. Nosotros estábamos alojados en un camping cercano, por lo que fuimos varias veces a pasear por el centro: nunca encontramos sitio a la primera.
Sin embargo, cualquier esfuerzo que se haga por ver Pontedeume está justificado. Seguid leyendo y acabaréis convencidos, como nosotros, de que se trata un lugar único y de lo mejorcito que ver en el extremo noroccidental de la Península Ibérica.
Turismo en Pontedeume: top 10 cosas que ver
Torreón de los Andrade
Empezamos la visita en el Torreón de los Andrade, que no es otra cosa que la antigua torre del homenaje de la casa-palacio de la familia que le da nombre. Es un edificio majestuoso, de esos que quedan grabados para siempre en la retina.

En la planta baja está la Oficina de Turismo de Pontedeume, donde os darán un mapita para visitar el pueblo y también información de calidad sobre todo lo que ver y hacer en los alrededores. Las plantas superiores son el Centro de Intrepretación Dos Andrade, cuya visita cuesta 2,91€ por persona (precio de 2024).

Os recomendamos acceder, ya que la exposición permanente es chulísima. Aprenderéis un montón de cosas sobre Pontedeume, sus familias más importantes y también sobre la vida cotidiana de los habitantes de este rincón de Galicia.
Además, podréis acceder a una especie de azotea, desde donde disfrutaréis de una panorámica magnífica tanto del puente de piedra que da nombre al pueblo como de la propia localidad.

Plaza do Conde
El Torreón de los Andrade da hacia la Plaza do Conde, una pequeña plaza que es coqueta a más no poder. En el centro encontraréis la Fuente del Pilón, un surtidor de agua tradicional elaborado con granito de la zona. Allí mismo está también el Mercado Municipal de Pontedeume, el clásico mercado de abastos que siempre hay que intentar visitar.

Por último, si vais hacia la Calle de Couceiro Freijomil, podréis ver la Biblioteca municipal. Está ubicada en un edificio que fue la Cátedra da Latinidade durante más de tres siglos.

Plaza Real
En cualquier caso, la Plaza do Conde no es más que otro aperitivo antes de meterse de lleno en el centro histórico de Pontedeume. El gran espacio abierto es la Plaza Real, antaño conocida como Plaza de Rolo. Se sabe que esta zona ha ejercido como plaza mayor desde que se fundó la villa, habiendo referencias a ella en documentos desde 1270.

Es un lugar con mucha vida, repleto de bares, restaurantes e incluso heladerías. Veréis a gente atravesarla a cualquier hora del día, es lugar habitual para quedar y también tiene un espacio protagonista durante las fiestas de Pontedeume. Allí mismo está el Ayuntamiento, por lo que sus balcones son escenario de pregones y declaraciones institucionales.

Palacio de Rajoy
No muy lejos de la Plaza Real está el Palacio de Rajoy. Cualquier cosa que digamos a continuación no será leída con atención, ya que seguro que tenéis en mente al ex Presidente del Gobierno diciendo cualquier cosa sin sentido. Intentad concentraros y volver a este post, pues el palacio es una pasada. Data del siglo XVIII y en su fachada encontraréis una mezcla excelente entre elementos compostelanos y de influencia francesa.

Convento de San Agustín
Otro edificio destacado que ver en Pontedeume es el Convento de San Agustín, del siglo XVI. Actualmente hace las veces de Casa de la Cultura, por lo que es frecuente encontrar en él exposiciones de arte gratuitas.

A su fachada barroca se le suma un magnífico claustro renacentista. Si os encontráis cerrado este último, podréis bordear el edificio y contemplarlo desde fuera, desde un bonito parque que hay continuación de él.

Iglesia de las Virtudes
Al otro lado de dicho parque está la Iglesia de las Virtudes, construida en el siglo XIV y ampliamente reformada en el XVII. Es uno de los edificios religiosos más queridos por los habitantes del pueblo, que lo llenan en cada servicio.

En el interior de este templo podéis contemplar un magnífico retablo mayor de estilo barroco. Data del siglo XVIII y es de lo mejorcito de la provincia en cuanto a arte sacro.

Plaza de San Roque
En un espacio que originalmente estaba extramuros, pero contiguo a una de las puertas del recinto amurallado del pueblo, está la Plaza de San Roque. Ha perdido una capilla que tuvo desde el siglo XVI hasta su demolición en 1840, pero aún así sigue siendo uno de los espacios abiertos más bonitos que ver en Pontedeume.

Iglesia de Santiago
Si desde esa plaza tomáis la Rua Igrexa, llegaréis hasta la Iglesia de Santiago. Fue erigida entre los siglos XVI y XVIII, siendo su elemento más característico su impresionante fachada de estilo barroca.

Abre de 19:00 a 21:00, la visita es gratuita y en su interior os espera una capilla mayor con una bóveda estrellada de estilo gótico. En el resto del templo predomina la arquitectura de corte clasicista.

Jardines del Lombardero
Cerrando el círculo que estamos haciendo por todo lo que ver en Pontedeume, no debe faltar una visita a los Jardines del Lombardero. Es el principal espacio público del pueblo, fruta de la antigua huerta que antaño tenía el palacio de los Andrade. Es un parque sensacional, aunque de manera incomprensible tiene prohibida la entrada a perros. ¿Quién es el tarado que hace ese tipo de normas?

Puente de Piedra
Por último, no se puede hacer una visita a Pontedeume sin pasar en algún momento por su impresionante Puente de Piedra. De origen medieval (probablemente del siglo XIV), en su momento llegó a tener hasta 68 arcos. Hoy en día cruza el río Eume gracias a quince arcos que soportan el paso constante de personas y vehículos.

No solo da nombre a la localidad, sino que es uno de los puentes más impresionantes de toda Galicia. Es uno de los símbolos de su ingeniería y un lugar evocador a más no poder.
Fragas do Eume, el paraíso a diez minutos en coche
Pontedeume es el trampolín perfecto para ir a visitar Fragas do Eume, un Parque Natural que es de lo mejorcito de Galicia. Está a escasos diez minutos en coche, distancia que os permitirá llegar hasta uno de los bosques atlánticos de ribera más importantes de todo el continente europeo. 9000 hectáreas de pura magia que están llenas de patrimonio, rutas de senderismo y rincones con encanto. Todo un must en esta zona de la Península Ibérica, de los que justifican por sí mismo un viaje.

Comer en Pontedeume
Pontedeume ofrece lo mejor de la gastronomía gallega concentrado en muy poquitas calles. Los alrededores de la Plaza Real son un auténtico paraíso para los amantes del buen comer y del buen beber, que encontrarán opciones para todos los gustos y bolsillos. Tan pronto podéis pegaros una mariscada de categoría como disfrutar una buena ración de pulpo elaborado de manera tradicional.

Es muy difícil que entréis en un sitio y comáis mal, así que no tiene mucho sentido hacer un elenco de los sitios más típicos. Eso sí, queremos hacer dos recomendaciones específicas. La primera es la Taberna Zas, famosa por tener los precios más económicos para tapear en el centro de Pontedeume. Ofrecen platos muy sencillitos (parrochas, zorza, mejillones, albóndigas o pulpo) a un precio imbatible. En sus mesas nunca faltan turistas japoneses, aunque en general veréis a locales.

Por otro lado, hablar de Galicia es hablar de empanadas. Podéis pedirla en casi cualquier bar, pero también comprarlas para hacer un picnic o llevarlas de vuelta a casa. Si os estáis preguntando dónde comprar empanadas en Pontedeume, la respuesta está clarísima. El lugar de referencia es la Panadería Patricio. Tiene dos locales, uno en la zona alta y otro en la baja. Ninguno es céntrico, pero os aseguramos que la gente del lugar compra allí sus empanadas. Si vais en domingo os tocará esperar, pero os aseguramos que elaboran un producto de categoría.

Mapa turístico de Pontedeume
Terminamos con el mapa turístico con todo lo que ver en Pontedeume: