El Lago Ness es la joya de la corona de las Tierras Altas de Escocia. No hay visita a las Highlands que se pueda considerar completa si no se hace una parada, aunque sea muy breve, frente a las oscuras aguas del segundo lago escocés más grande que existe. Es un destino turístico famoso en el mundo entero, alrededor del cual es posible ver y hacer prácticamente de todo. En este post os contamos un poquito de historia sobre este popular lago y os mostramos sus visitas más imprescindibles.
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En busca de Nessie
Más allá de ser un lugar precioso, el Lago Ness es famoso en el mundo entero por Nessie, un monstruo cuya existencia lleva siendo objeto de debate desde el siglo VI. Teniendo en cuenta que las aguas del lago son especialmente turbias y que tiene una profundidad de más de 225 metros, no es de extrañar que hayan surgido todo tipo de leyendas sobre el mismo. Incluso en tiempos de tecnología punta como los que vivimos actualmente, cada cierto tiempo aparecen en los telediarios de todo el planeta noticias sobre la confirmación de la existencia del monstruo del Lago Ness.
Esa es, precisamente, la primera actividad que tenéis que hacer en el lago: buscar al bueno de Nessie. Podéis hacerlo de mil maneras, ya que junto a las orillas del lago hay puntos de observación, ciudades, ruinas de castillo e infinidad de referencias al monstruo.
Adoramos toda la parafernalia relacionada con Nessie, pero no vamos a negar que a veces es un poco cargante. Igual que da un poco de pereza ir a Rumanía y ver referencias a Drácula aunque se esté a 300 kilómetros de su castillo, es un poco cansino estar en los alrededores del lago y que haya referencias al monstruo en cada rotonda.
Y ojo, que no lo decimos como una crítica, sino todo lo contrario: pensamos que prestarle tanta atención a Nessie hace que pasen desapercibidos otros muchos puntos de interés. Precisamente, son los que os vamos a enseñar a lo largo del siguiente artículo, ya que el paisaje cultural y natural del Lago Ness es rico, profundo y lleno de posibilidades.
Turismo en el Lago Ness
Vamos a enseñaros todo lo que hay que ver en el Lago Ness de oeste a este, haciendo un recorrido por la orilla norte (aunque con algunas referencias al sur). Os dejamos igualmente un mapa turístico del Lago Ness, para que podáis planificar mejor vuestra visita:
Fort Augustus
Empezar hablando de Fort Augustus tiene todo el sentido, ya que es un punto de partida clásico en la propuesta turística del Lago Ness. La ciudad en sí es tranquila y sencilla, con algunas cositas para ver (como una abadía, un puente o el cercano Commando Memorial) pero tampoco es que sea lo más de lo más. En cualquier caso, junto al pueblo está el Canal de Caledonia, que conecta el Mar del Norte y el Atlántico a través de diferentes esclusas y presas. Eso hace que el ir y venir de barcos sea constante, incluyendo muchos pequeños cruceros que os permitirán conocer el Lago Ness desde dentro.
Loch Ness View Point
Mención aparte merece el Loch Ness View Point que hay en Fort Augustus. Queremos hablar de él como algo independiente no por su lejanía, ya que realmente está en el propio pueblo, sino porque es uno de los lugares más visitados del lago. Su emblemático cartel es instagrameable como pocos. Además, es un punto perfecto para pasarse un buen rato intentando encontrar al monstruo.
Cascadas de Foyers
Yendo por el lado sureste del lago, a unos 25 minutos en coche de Fort Augustus, llegaréis a las Cascadas de Foyers (Falls of Foyers). Tendréis que caminar un poquito desde el aparcamiento, pero os aseguramos que es un salto de agua precioso. No es el sitio más turístico del lago, así que puede ser una buena opción si queréis huir de las aglomeraciones.
Carreteras: A82 y B852
El lago se puede recorrer por las dos orillas. Al norte tenéis la A82, una carretera cuidada y muy transitada. Por otro lado, al sur está la B852, una carretera secundaria sinuosa y por la que os moveréis más despacito. En cualquier caso, ambas opciones están repletas de interesantes paradas: miradores, tiendas, pequeñas incursiones en la naturaleza…
Castillo de Urquhart
También a media hora de Fort Augustus, aunque justo por la otra orilla, está el Castillo de Urquhart. Sus ruinas son preciosas por sí mismas, pero con el lago de fondo se convierten en una de las postales más increíbles de todo el Lago Ness. La entrada al castillo cuesta unas 15 libras, pero os aseguramos que hasta el último céntimo estará bien invertido. ¡Ah! Y no muy lejos de allí tenéis el Loch Ness Centre & Exhibition, otro punto más en el que recibir información sobre el lago.
Inverness
En el extremo opuesto a Fort Augustus está la ciudad de Inverness, una ciudad que nos encantó y en la cual vimos un montón de cosas interesantes. Es la capital de las Highlands, tiene el clima más frío de todo el Reino Unido (en diciembre de 1995 se registraron casi 20 grados bajo cero) y es una visita súper inter guay. No os perdáis su arquitectura victoriana, su castillo-observatorio ni la mítica Leaky’s Bookstore, una librería que por sí sola justifica la visita.
Dores y su playa
Por último, a unos 20 minutos en coche de Inverness está la localidad de Dores, que tiene el honor de ofrecer la playa más famosa del Lago Ness. Perfecta para pasear, tomar algo en los alrededores y, por supuesto, intentar encontrar una última vez al monstruo del Lago Ness. ¡Buena suerte buscando a Nessie!
