Córdoba es una de las ciudades más interesantes del sur de Europa, con muchísimo que ver y que hacer. Emblema de Andalucía (y, por ende, de España), se trata de una urbe en la que la romanos, musulmanes y cristianos han dejado una herencia absolutamente maravillosa. No hay paseo por sus calles que no resulte inolvidable para el viajero: por su patrimonio, por su ambiente y también por su deliciosa gastronomía. Es un destino con infinitas posibilidades, por lo que cuando se plantea una ruta de un día siempre hay que hacer duros sacrificios. Sin embargo, nosotros os traemos una guía con la cual podréis aprovechar al máximo vuestro tiempo allí.
Tabla de contenidos
Introducción: una visita a la capital de los Omeyas
Córdoba es una ciudad con más de 2000 años de antigüedad. Fue fundada por el Imperio Romano en el siglo II antes de Cristo, siendo Colonia Patricia Corduba. Su ubicación era excelente y la urbe prosperó rápidamente, convirtiéndose en capital de Hispania Ulterior. Tras la invasión musulmana del siglo VIII, pasó a ser capital del Emirato de Córdoba. Siguió siendo un lugar dinámico a más no poder, hasta el punto de que en tiempos del Califato de Córdoba era uno de los sitios más importantes de todo el mundo islámico.
En 1236 los cristianos recuperaron la ciudad, revelándose este hecho en uno de los grandes hitos de la «Reconquista». En seguida aprovecharon para convertir la mezquita en catedral, construir iglesias por doquier y asegurar su dominio a través de grandes desplazamientos de población. En cualquier caso, parece ser que la convivencia entre cristianos, musulmanes y judíos pudo sobrellevarse durante bastante tiempo, siendo uno de los ejemplos que se suelen poner para hablar de ciudades de las tres culturas.
Actualmente Córdoba mantiene un casco histórico único, con infinitas cosas que ver. Su centro histórico, la vecina Medina Azahara y la Fiesta de los Patios Cordobeses son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, siendo una de las pocas ciudades del mundo con tres elementos distintos en la lista.
El centro es enorme, pues con casi 250 hectáreas es uno de los núcleos urbanos históricos más grandes de todo el continente europeo. Le ocurre como a Sevilla: siempre falta tiempo en Córdoba. Sin embargo, si seguís leyendo encontraréis todas las herramientas necesarias para organizar una ruta de un día.
Cómo llegar a Córdoba
Antes de saber qué ver, lo primero es tener información sobre cómo llegar a Córdoba. Básicamente tenéis tres opciones:
- En coche: es una ciudad muy bien comunicada, dado que la A-4 pasa junto a ella. A modo de referencia, está a tres horas y media de Madrid, una hora desde Sevilla, hora y media desde Málaga o cinco horas desde Valencia. Portugal no queda demasiado lejos gracias a la N-432.
- En tren: Córdoba es uno de los destinos clásicos de AVE, por lo que llegar en tren es una maravilla en términos de velocidad y comodidad (no así en precio). Las distancias son mínimas: 100 minutos desde Madrid, 40 desde Sevilla, 50 desde Málaga, 90 desde Granada… No es raro hacerse varias capitales andaluzas en un mismo viaje gracias a sus comunicaciones ferroviarias.
- En avión: Córdoba tiene el típico aeropuerto maldito español, que ha pasado muchos años sin prestar servicio y que siempre está a punto de ser puesto en funcionamiento. No sabemos si estará activo en el momento de leer estas líneas, pero no muy lejos tenéis los aeropuertos de Sevilla y Málaga.
Turismo en Córdoba: 12+1 visitas imprescindibles
Vamos ahora con una ruta de un día por Córdoba, llena de cosas que ver y que hacer. Hay muchísimo esperando al viajero en la ciudad califal, pero nosotros lo hemos sintetizado todo en trece paradas que consideramos obligatorias:
Mezquita-Catedral de Córdoba
Empezar por la Mezquita-Catedral de Córdoba es prácticamente obligatorio en todas las listas de qué ver en la ciudad. Es su edificio más destacado, pero también una de las grandes construcciones de todo el planeta. Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sus interminable sucesión de arcos de herradura de dos colores y su majestuoso mihrab justifican por sí solos el viaje a la ciudad.
Es un edificio enorme, que os entretendrá al menos una o dos horas. Conviene que saquéis las entradas con antelación y que os preparéis para sufrir un poco de agobio por las aglomeraciones, pero os aseguramos que estamos hablando de uno de los edificios más bonitos que hemos visto en nuestra vida. Precisamente por eso le hemos dedicado un post aparte, porque teníamos mucho que decir sobre esta joya.
Caballerizas Reales
Como ya hemos dicho en varias ocasiones, los cristianos se esforzaron en hacer muchas transformaciones en Córdoba. Había que dejar bien claro quién mandaba, así que por doquier encontraréis construcciones para tal fin. Una de ellas es la conocida como Caballerizas Reales, puesta en marcha por Felipe II a finales del siglo XVI. El edificio tenía la función de criar caballos de pura raza española, siendo un lugar clave en la historia de la propia especie a nivel mundial. En su interior ya no se crían caballos, pero sí podéis visitar una colección de carruajes decimonónicos.
Alcázar de los Reyes Cristianos
Al ladito de allí está el Alcázar de los Reyes Cristianos, que data del siglo XIV. Fue concebido para un uso eminentemente militar, hasta el punto de que posteriormente fue utilizado por los Reyes Católicos como residencia durante la toma de la ciudad de Granada. También fue el marco de algunas de las reuniones más determinantes entre Isabel la Católica y Cristóbal Colón, por lo que está escrito en letras de oro dentro del devenir histórico de España. El conjunto es amplio, lujoso y diverso, ofreciendo estancias tan emblemáticas como el Salón de los Mosaicos o los Baños Reales Mudéjares. Sus jardines también son una auténtica pasada.
Puente Romano
Desde esta zona también tenéis que ver el Puente Romano de Córdoba, una construcción del siglo I después de Cristo. Recordad que la urbe fue fundada por el Imperio Romano y que rápidamente se convirtió en uno de sus núcleos occidentales más importantes, por lo que fue el propio emperador Augusto el que ordenó su construcción. Es uno de los grandes hitos de la ingeniería de su tiempo, pues salva el río Guadalquivir gracias a 16 arcos dispuestos a lo largo de los 331 metros de longitud del puente. Merece la pena que lo crucéis, que lo veáis desde arriba y también que disfrutéis de la panorámica que os dará de esa zona de la ciudad.
Iglesias Fernandinas
Uno de los monarcas que más contribuyó al desarrollo de la Córdoba Cristiana fue Fernando III el Santo, que durante su mandato ordenó la construcción de once templos. Estos han sido puestos en valor en fechas recientes, en un itinerario cultural conocido como Ruta de las Iglesias Fernandinas. Si solo estáis un día en la ciudad quizá no tengáis tiempo para verlas todas, pero seguro que os iréis topando con algunas: la Iglesia de Santa Marina, la de San Francisco, la de San Andrés…
Palacio de Viana
Otra visita obligada en la lista de cosas que ver en Córdoba es el Palacio de Viana. Pese a que nos escoció un poco que las entradas oscilasen entre los 8€ y los 12€, tenemos que reconocer que es un edificio absolutamente imprescindible. Se trata de un conjunto palaciego de más de 6500 metros cuadrados, en el cual podréis visitar hasta doce patios diferentes. Sin lugar a dudas, de lo mejorcito que la nobleza cordobesa ha legado a nuestros días. Os lo recomendamos encarecidamente.
Ayuntamiento e Iglesia de San Pablo
Vamos ahora a hablaros de un lugar que no suele venir en las guías pero que a nosotros nos gustó mucho. Nos referimos al binomio formado por el Ayuntamiento de Córdoba y la Iglesia de San Pablo (que forma parte de las susodichas Iglesias Fernandinas). No debería suponeros mucho desvío pasar por allí y os aseguramos que es una de las zonas más interesantes de la ciudad.
Plaza de las Tendillas
En la Córdoba moderna no debería faltar una parada en la Plaza de las Tendillas. Es uno de los grandes puntos de encuentro para los cordobeses del siglo XXI, que pasean de un lado a otro bajo su mítico reloj. Tiene una fuente con una estatua, está rodeada de restaurantes y en las inmediaciones encontraréis una de las mejores zonas de shopping de la ciudad.
Templo romano
A poquitos pasos de allí está el Templo Romano, otra cosa que ver en Córdoba. Pese a que es uno de los edificios más antiguos de la ciudad, ya que fue construido en el siglo I después de Cristo, no fue descubierto hasta el año 1951. En ese momento estaban ampliando el ayuntamiento, en un proceso que supuso el hallazgo de estos restos arqueológicos. No son cosa menor, ya que hablamos de un templo de 32 x 16 metros, el cual estaba integrado en el Foro de la antigua Corduba.
Plaza de la Corredera
Siguiendo con la zona moderna, no estaría de más hacer una visita a la Plaza de la Corredera. Su nombre se debe a que durante mucho tiempo se celebraban en ella corridas de toros, algo que por suerte ha dejado de suceder. En realidad, se trata de un espacio polivalente, pues también ha sido sede de un mercado e incluso la Santa Inquisición realizó procesos en ella. Hoy en día es un espacio eminentemente gastronómico, pues junto a sus arcos encontraréis varios restaurantes.
Plaza del Potro
La Plaza del Potro también se merece un poquito de vuestro tiempo. Es quizá una de las más auténticas del centro de Córdoba, pues los edificios blancos que la rodean hacen que sea pintoresca como pocas. Se llama así porque en su momento había un establecimiento que vendía potros, algo que ha quedado inmortalizado en la escultura del centro de la plaza.
En la misma encontraréis el Museo Julio Romero de Torres, uno de los grandes pintores cordobeses. También está el Centro Flamenco Fosforito, ubicado en un edificio que fue mencionado en el Quijote. Además, en los alrededores encontraréis algunos de los mejores bares y tabernas para tapear en la ciudad.
Patios cordobeses
Vamos cerrando la lista de cosas que ver en Córdoba, en este caso dando una vuelta en busca de los míticos patios cordobeses. Aunque en tiempos del Festival (que suele ser en mayo) suelen estar abiertos muchísimos, el resto del año no es tan sencillo encontrarlos. Nuestra recomendación es que vayáis a la Calle San Basilio y echéis un ojo, por si alguno estuviese abierto. El más fácil de ver es el del número 40 de esa misma calle, donde a cambio de un donativo (un euro por persona) os dejarán echar un vistazo. En el 14 de la calle hay un conjunto de varios patios que también se puede visitar.
Barrio Judío
Para el final hemos dejado una de las zonas más chulas: el Barrio Judío de Córdoba. Es una de las juderías más importantes de España, pues este conjunto de laberínticas calles parece no tener fin en cuanto a cantidad y belleza. Os recomendamos recorrerlo en busca de sus puntos de interés más destacados (como la Sinagoga, el Zoco o la Casa Andalusí), pero también que os mováis sin rumbo y os dejéis enamorar por esta parte de la ciudad.
No se nos ocurre mejor manera para terminar una rutita de un día por Córdoba que perdiéndonos un rato por la judería. Por la tarde sus calles están especialmente bonitas, por lo que hacednos caso y reservad esta joya para el final.
Consejos para visitar Córdoba
Aparte de las paradas imprescindibles que ver en Córdoba, también sería bueno que tuvieseis presentes estos consejos generales para visitar la ciudad:
- Visitar todo en Córdoba en un solo día es imposible. Nosotros os hemos hecho una ruta de un día, pero la ciudad da fácilmente para tres o cuatro jornadas más. Os recomendamos seguir nuestro consejo y ver menos cosas sin prisa, siempre será más agradable que ir corriendo de un sitio a otro sin poder disfrutar de los detalles.
- Algunos sitios requieren sacar entrada con antelación o, al menos, es muy recomendable. Básicamente nos referimos a la Mezquita y al Palacio de Viana.
- Córdoba es una ciudad que cambia mucho en función de sus eventos, como la Feria o el Festival de los Patios. Si tenéis intención de participar en ellos es estupendo, pero si no fuera el caso tratad de encontrar otras fechas o si no todo estará colapsado.
- Cuidado con el calor, puede ser sofocante en los meses de verano. También sería muy recomendable hacer coincidir la visita con otras épocas.
- Comer en Córdoba es estupendo, pues la oferta gastronómica es enorme y de muchísima calidad. Sin embargo, siempre encontraréis mucha gente, así que os recomendamos reservar si tenéis idea de ir a un sitio en concreto.
- Calzado cómodo: esto es aplicable a casi cualquier escapada urbana, pero en el caso de Córdoba es doblemente importante. Al fin y al cabo, es un casco histórico enorme.
Alojamiento en Córdoba
Córdoba tiene una excelente relación calidad-precio en lo que a alojamiento se refiere. Dormir en la ciudad es tirando a barato, al menos algo más barato que en las cercanas Sevilla y Granada. No debería ser difícil encontrar alojamientos buenos por 60-70€ la noche, siempre teniendo en cuenta que no sea durante la celebración de algún evento (como el Festival de los Patios). A modo de referencia, las mejores zonas son la Judería (por lo cuqui que es) y los alrededores de la Plaza de la Corredera (por sus precios). Si tenéis coche, los alrededores de la ciudad también son una buena opción.
Comer en Córdoba
Lo hemos dicho hace unos pocos párrafos: comer en Córdoba es maravilloso. Hay muchísimos sitios, unos precios razonables y la calidad general es alucinante. Lo único malo es que siempre hay muchísima gente, salvo que apostéis por adelantar o atrasar vuestra hora de la comida (y aun así tendréis que pelear por vuestra mesa con los guiris, que tienen también otros horarios).
Los platos típicos de Córdoba están claros: salmorejo (como el gazpacho, pero más denso), flamenquín (como un sanjacobo enrollado), rabo de toro, berenjenas fritas, ajoblanco… La lista de manjares es interminable. Os recomendamos encontrar alguna taberna y pedir unos cuantos en forma de tapa, ya que así podréis probar varios en una misma comida.
No sabríamos decir una zona concreta para comer, pues en general todo el centro histórico está lleno de sitios con una gran calidad y unos precios más que aceptables. ¡Incluso los más turísticos! Lo que nunca nos ha fallado es Bodegas Mezquita, una serie de cuatro o cinco establecimientos repartidos por la ciudad. Son típicos a más no poder, sus berenjenas califales deberían ser patrimonio de la humanidad y el trato es siempre excelente. Una apuesta segura.
Mapa turístico de Córdoba
No hay guía que esté completa sin un mapa turístico, así que aquí os dejamos el de Córdoba. Aquí os dejamos señalados los principales puntos de interés de la ciudad, siempre teniendo claro que se trata de una ruta pensada para un único día en la misma:
