Los árboles singulares de la Comunidad de Madrid

¿Sabíais que la Comunidad de Madrid tiene un enorme catálogo en el que se recogen sus árboles singulares? Se trata de una lista que se lleva elaborando desde el año 1992 y que ha ido evolucionando con el paso del tiempo. En este artículo os contamos más sobre ella y os hablamos de algunos ejemplares que hemos podido visitar.

Una lista en constante desarrollo

La lista de árboles singulares de la Comunidad de Madrid se empezó a pergeñar en el año 1991, cuando se publicó la Ley para la Protección y Regulación de la Fauna y Flora Silvestres. Solo un año después se aprobaba un decreto en el que se catalogaban las Especies Amenazadas, incluyendo un apartado específico con 225 árboles singulares «cuya protección exige medidas específicas».

Desde entonces, la lista se ha actualizado en numerosas ocasiones. Al fin y al cabo los árboles son seres vivos y los criterios de conservación van evolucionando, por lo que es lógico que esto pase. En cada revisión se eliminan algunos ejemplares y se agregan otros que merecen una especial protección. Por ejemplo, en 2015 se retiraron 43 ejemplares que habían fallecido (o simplemente desaparecido) y se incluyeron 69 nuevos.

Cuando un ejemplar se añade a la lista, se le considera patrimonio de la Comunidad de Madrid y sus propietarios (en caso de estar en terreno privado) están obligados a conservarlos. Por el contrario, cuando un árbol sale de la lista se permite que se tale o que se le retiren ramas.

Árboles-museo y árboles ocultos, en el mismo listado

A nivel turístico, la lista es súper interesante. Los árboles singulares están repartidos literalmente por toda la Comunidad de Madrid. Y no os los imaginéis en medio de la nada (que también), pues muchos de ellos se encuentran en parques de grandes ciudades, en el centro de pueblos o en rutas muy populares.

De hecho, la lista tiene dos enfoques bien diferenciados. Por un lado, algunos árboles están claramente señalizados, se conoce cómo llegar hasta ellos y en sus alrededores hay interesantes paneles informativos. Vamos, que son como pequeños museos al aire libre.

Por otro lado, existen también árboles de difícil acceso, que apenas están señalizados o que directamente se recomienda no visitarlos, ya que están en terrenos privados o por motivos de conservación lo mejor es no acercarse a ellos.

A lo largo de estos años, hemos conocido muchos de estos árboles singulares. Y tenemos que decir que la experiencia siempre ha sido fascinante. Nos vienen a la mente varios al momento, como el Tejo Centenario de Canencia o varios ejemplares en los alrededores de La Hiruela.

Todo lo que podemos decir de los árboles singulares de la Comunidad de Madrid es que son excelentes representantes de la mejor versión de la naturaleza. Si no fuese por la terrible sobreexplotación que los humanos hemos hecho del planeta, el mundo estaría repleto de árboles con cientos de años de antigüedad.

Precisamente por eso, pensamos que esta iniciativa es lo más, pues estos árboles singulares han de ser cuidados y puestos en valor como merecen.

¿Has visto alguna vez alguno? ¡Te leemos en los comentarios!

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