La Playa de Uttakleiv es uno de los lugares más emblemáticos de las islas Lofoten. Sus pulidas piedras, las ovejas que campan a sus anchas por los alrededores y las montañas cercanas hacen que sea una estampa única, de esas que son capaces de atraer a miles de personas año tras año. Seguro que alguna vez habéis visto este sitio, ya que es un paraíso para los amantes de la fotografía. Prácticamente a cualquier hora del día veréis a gente con su cámara y con su trípode, buscando la siguiente imagen viral para redes sociales.
La playa de las Lofoten que siempre sale en Instagram
Llegar a la Playa de Uttakleiv es sencillo si estáis en las Lofoten. Se encuentra en el oeste de la isla de Vestvagoya, a donde llegaréis tras un largo desvío desde la carretera E10. El aparcamiento cuesta 5€ por 3 horas (o 60€ si tenéis intención de pasar la noche). A diferencia de en otras playas cercanas, donde la gente se suele escaquear con esto, aquí suele haber un operario que se encargará de que paséis por caja.
Una vez allí, tendréis ante vosotros una playa realmente singular. Su principal seña de identidad son las piedras. Pese a que tiene tramos de fina arena, lo cierto es que Uttakleiv es popular por sus enormes rocas pulidas, con forma generalmente redondeada. Entre ellas se cuela el agua cuando sube o baja la marea, dejando un buen caldo de cultivo para hacer fotografías únicas. En ese sentido, es muy conocida la zona del ojo de Uttakleiv, una piedra que está sumergia en un charco y que parece un ojo humano.
La Playa de Uttakleiv es también un excelente punto de observación de auroras boreales (durante los meses fríos del año) y del sol de medianoche (durante los meses cálidos). Aunque pudiera parecer un destino reservado solo a cuando hace buen tiempo, es muy fotogénica también en días malos. Las brumas sobre las rocas quedan de maravilla en la cámara.
Playa y ovejas, un matrimonio bien avenido
Aunque vimos muchos fotógrafos, eran claramente superados por… ¡las ovejas! Y es que justo antes de la Playa de Uttakleiv hay un enorme prado, en el que durante los meses de verano suele haber muchas ovejas en libertad. Están acostumbradísimas a los humanos, así que se acercan más de la cuenta. Esto nos resultó realmente curioso, ya que no se suele ver a estos animales en la playa.
Hablando de animales, dos temas bastante diferentes. Por un lado, ojo con los mosquitos: como no vayáis bien preparados, acabaréis hasta arriba de picaduras. Por otro lado, las islas de enfrente de la playa se corresponden con la Reserva Natural de Aesholman, donde habitan varias especies protegidas.
Más allá de las fotografías en la zona de las piedras, Uttakleiv es un sitio enorme para pasear y dejar la mente en blanco. Lo pasamos genial recorriendo esta zona de las Lofoten, sin duda una de las más bonitas.
Si tenéis ganas de caminar, podéis ir a pie hasta la cercana Playa de Haukland, en un paseo que se puede hacer por el interior de la montaña. Incluso lo podéis combinar con la ruta a Mannen, desde donde tendréis unas vistas preciosas.